Hunter Thompson: Miedo y Asco en el Planeta Tierra

No se mete en la piel de quienes escribe: Se mete a un lado. No se queda callado: Participa, se entromete, les cala en lo que hacen hasta que (como su relación con los Hell's Angels) lo dejan medio muerto a la orilla de la carretera. Por ser un metiche, por haberse atrevido a ser un periodista GONZO. de las páginas deportivas a las de política en una revista de rock. Rolling Stone ha abierto sus calientes entrañas de papel al estilo de Hunter Thompson aunque le viniera valiendo madres el rock. Esta es (o al menos lo era en esos tiempos) una revista para arriesgados. Para quienes no se intimidan en confesar que por más que recorren este mundo sólo sienten Miedo y Asco.

Vamos a conseguir sus documentales. Vamos a echarle un vistazo a la película Miedo y Asco en Las Vegas. Vamos a arrinconarnos hojeando uno de sus libros editados en Anagrama.

En este mundo hay que ser GONZO (metiche) para conseguir un poco de diversión.

Ver Miedo y Asco en Las Vegas

Brian Jones

El primer rocker Glam. Padre de más de seis criaturas no reconocidas. Fundador de los Rolling Stones y después despedido por ellos (aunque ya no le importaba porque se había aburrido del tipo de música que tocaban). Afecto al alcohol, las drogas y la música tradicional marroquí.

Brian Jones fue un ciudadano del país de los excesos, pero también un obsesionado de lo exótico (ahora confundido con lo alternativo), en una vida donde hasta la felicidad le parecía aburrida. Dos amigos suyos (Jim Morrison y Jimmy Hendrix) le seguirían en la solución que encontró: Morir a los 27 años.

La película sobre su vida: Stoned

Desaparecen porterías en Guadalupe, N.L.

La voz de los niños

En el mismo municipio quieren poner el nuevo estadio de los Rayados del Monterrey, pero los niños le piden a la alcaldesa Ivonne Alvarez más canchas públicas con alumbrado y sobre todo, porterías. Porque las que tenían se las están robando. ¿Quiénes? ¿Los Zetas? Naaah.

La ironía de la salud

Una administración municipal preocupada por el deporte, no pensaría solamente en la manera de remover árboles de un bosque, sino en la salud. Y la salud de los guadalupenses no está en irse a un estadio nuevo a beber cerveza y estar a la expectativa de en qué momento empiezan los pleitos entre porras del equipo local y el visitante.

Guadalupe y el Bicentenario

¿Cómo recibirá el municipio de Guadalupe los festejos del tan mentado Bicentenario? Con menos árboles, porterías y seguridad. No se diga cultura, no se diga educación o calidad de vida. Pero al menos le estamos dejando algo propositivo a los niños: La libertad de decir qué es lo que quieren (antes ni eso).

Diego Rivera

En una carta (firmada en 1956) que el poeta tabasqueño Carlos Pellicer escribe al Regiomontano Universal Alfonso Reyes, llama a Diego Rivera “el hombre que más cambios ha producido en la pintura del continente americano del siglo XX”.

De Diego Rivera se puede hacer una miniserie para adultos. Ahí se pueden tratar temas como el comunismo (y su amistad con Trotski), el amor (Frida Kahlo), su relación con los burgueses que manejan el mundo (Rockefeller), intelectuales de su tiempo (José Vasconcelos y el mismo Alfonso Reyes).

Ha sabido hacer como pocos, lo que se llama gestión cultural, llegando a pintar murales en oficinas públicas y retratos de personalidades de su tiempo. Un mortal que volaba sobre el pantano con su bandera roja, al que incluso los políticos más quiquillosos debían tratar. ¿Qué tanta influencia no tendría?

Le decían el Sapo, por los ojos saltones… y también el chile bola, por lo gordo. Juzgue usted.

10 principios del Periodismo Digital

Alan Rusbridger, director de Guardian Media and News, reseñó 10 principios básicos del periodismo digital:

1. Fomentar la participación y la retroalimentación.
2. El medio no es para el grupo de periodistas que lo hace, sino para “ellos”, los lectores.
3. Animar a otros a iniciar un debate, publicar material o hacer sugerencias.
4. Ayudar a crear comunidades en torno a intereses comunes y temas de importancia.
5. Ser abierto y formar parte de la Web: no tenerle miedo a las herramientas en red
6. Reunir y supervisar el trabajo de otros.
7. Aceptar que los periodistas no son los únicos autorizados y expertos. Hay otras voces interesantes.
8. Disfrutar, expresar y reflejar la diversidad, y promover los valores compartidos.
9 . Aceptar que la publicación puede ser el comienzo del proceso periodístico y no el final
10. Ser franco y abierto a los desafíos y mejoras, incluyendo las correcciones, aclaraciones y debate.

Woody Allen

De entre sus personajes (inevitablemente enfermos), se le identifica más con las manías de "Sueños de un seductor", los gustos asaltacunas en "Manhattan" y el mártir permanente de "Celebrity".

Sí, Woody Allen no es una persona en sus cabales ¿Pero quién lo es?

Brincando como una papa caliente entre sus cómics, libros de cuentos, películas y entrevistas, no es alguien que alucine alergias o enfermedades, sino quien las exagera. "Un pequeño grano en una mano podría ser un cáncer".

Ver o descargar MANHATTAN

Ver o descargar SUEÑOS DE UN SEDUCTOR

Quiero un mundo de caramelo

No me vean mal por decir que quiero un mundo de caramelo. Donde todo sea mejor, y pueda irme a beber unas cervezas a los tabledances de Villagrán, a los antros del Barrio Antiguo, a las cantinas de Ruperto Martínez o de Reforma, y no esperar balas.

Un mundo donde no nos quieran meter la propaganda del Bicentenario por el trasero y los políticos no se esperen a que haya dos muertes en las universidades privadas para reaccionar, convocando a una manifestación.

Diría incluso que un mundo sin futbol, pero me conformo con que no construyan el nuevo estadio de los rayados del Monterrey en el único parque con flora original que nos queda en el área metropolitana, en el Bosque de La Pastora.

¿ACASO ES MUCHO PEDIR?

Por supuesto que es mucho pedir. Porque eso sería precisamente un mundo de caramelo. No el México desgastado desde la conquista, todavía ANTES del Bicentenario, que nos han heredado.

FRACASO DE UN PROYECTO GENERACIONAL

En los años ochenta y noventa del siglo pasado existía la proclama mediática de que los jóvenes de esta generación eran el Futuro de México.

Prueba no superada.

Ahora, con todo gusto les regresaríamos su sobrante de futuro.

¡A sobrevivir se ha dicho!